Es una obra de carácter experimental sin una dramaturgia de teatro “convencional”. Tres personajes nos llevan a través de diversos medios por un paseo al interior de su ser; Aparecen los recuerdos de la niñez, experiencias de frustración y la memoria de los difuntos; la necesidad de volar para trascender. Son las palabras conjugadas con objetos de alto valor simbólico, los sonidos, y otros lenguajes del arte quienes guían nuestra atención para ser espectadores de una mecánica escénica donde los significados se traducen de distintas maneras de acuerdo a cada espectador. Al final, lo único certero es el sentimiento que produce el vacío y el silencio…